Otoplastia – Cirugía de las orejas
La otoplastia es una cirugía facial que corrige las orejas que llaman la atención, bien por su tamaño o por su forma. Es una de las cirugías más comunes y más demandadas tanto en niños como en adultos.
Los candidatos para someterse a una otoplastia son aquellas personas, niños o adultos, que presenten orejas despegadas, asimétricas o desproporcionadas con el conjunto de la cabeza.
Generalmente este defecto es motivo de burla en el colegio y de baja autoestima. Para disimularlo se utilizan peinados largos y se evitan los recogidos.

Procedimiento
La otoplastia es absolutamente indolora, se realiza bajo anestesia local y una ligera sedación. La duración de la intervención es de unas 2 horas aproximadamente.
La incisión se sitúa por detrás de la oreja, de manera que después de la intervención al quedar más pegada a la cabeza, la cicatriz no se verá.
Se deja un vendaje que al día siguiente se cambiará por una cinta de pelo ancha y elástica.
Postoperatorio
Al día siguiente se debe acudir a la consulta para realizar una cura, retirar el vendaje y aplicar otro nuevo más pequeño con una cinta elástica de pelo ancha.
A los 3 días se realizará una nueva cura, permitiendo ya el lavado de la cabeza. A los 8 días se cura de nuevo y se empiezan a retirar algunos puntos. Los puntos finales no se retirarán hasta los 12-15 días.
Una vez retirados los puntos se permite retirar la cinta de pelo durante el día, si bien tendrá que dormir con ella durante 1 mes aproximadamente. No se deben realizar esfuerzos durante unos 15 días aproximadamente.
Durante la semana posterior a la intervención es importante tomar antibióticos profilácticos para evitar la posibilidad de una infección y antiinflamatorios que disminuyen la posible molestia.
En prácticamente casi todos los casos los resultados de la cirugía de otoplastia son espectaculares. Los pacientes mejoran la simetría de su rostro y mejoran la confianza en sí mismos.