La carboxiterapia consiste en la infiltración de CO₂ en el tejido con fines terapéuticos.
Las consecuencias del aumento de concentración de CO₂ en el lugar de punción son:
- Aumento del flujo sanguíneo y por tanto una hiperoxigenación del tejido. Esta es una de las consecuencias más importantes y evidentes, lo que provoca una mejoría importantísima del metabolismo del tejido y por tanto estimula la formación de colágeno mejorando de una manera evidente el espesor de la piel y su coloración.
- Vasodilatación ateriolar.
- Drenaje del medio extracelular.
- Estimulación de las células pluripotenciales del tejido.
- Acción lipolítica, es decir, reducción del tejido graso.

¿Para qué se utiliza?
Debido a esta hiperoxigenación del tejido, tiene efectos beneficiosos en diferentes áreas:
Medicina estética:
- Celulitis: al estar alterada la circulación, y por tanto la oxigenación del tejido graso, al aplicar la carboxiterapia se normaliza el tejido en pocas sesiones
- Pre y post liposucción
- Ojeras: disminuye mucho la coloración violácea
- Flacidez
- Estrías
- Mejora estética de las cicatrices
- Rejuvenecimiento facial y escote, corporal, manos…
Dermatología:
- Alopecia
- Psoriasis
- Acné
- Pre y postoperatorio de injertos de piel
Otras especialidades médicas, como la medicina deportiva, la utilizan para las contracturas musculares, en reumatología para la artritis y la artrosis y en angiología para úlceras varicosas.
