Llamamos Drenaje Linfático Manual a una técnica de masaje relajante y calmante que consigue transportar el líquido encargado de eliminar las sustancias del cuerpo (linfa), y de esta forma nutrir, reparar, renovar y rejuvenecer el organismo, limpiándolo de residuos tóxicos.

¿Qué beneficios concretos conseguimos con la linfoterapia?

  • En nuestra piel: mejora de problemas de acné, dermatitis perioral y eritema facial persistente (cuperosis)
  • En el tejido graso: mejora de la celulitis
  • En casos quirúrgicos: es muy aconsejable en pre y post-cirugía reparadora y estética, y en la prevención y tratamiento de cicatrices
  • En tratamientos contra el envejecimiento y en casos de piernas hinchadas y cansadas, entre otros.

¿Por qué funciona el masaje linfático manual?

Porque actúa en el espacio que va desde las capas profundas de la piel hasta el plano muscular, y todos los elementos que están contenidos en esta zona. Actuando en estas partes del cuerpo consigue reducir los posibles estancamientos y edemas post traumáticos que puedan haber provocado la alergia, la cirugía u otros, así como logra sanear los tejidos, un efecto que se consigue cuando se eliminan toxinas, desechos y microorganismos.

¿Cómo son estos masajes?

El masaje linfático manual actúa indirectamente sobre la circulación de la sangre mejorando la microcirculación y favoreciendo la nutrición celular, lo que hace posible que nuestra piel se vea más bella.

La duración media aproximada  de un tratamiento de este tipo se encuentra entre los 45 y 60 minutos por sesión.

¿Hay algún caso en el que no pueda recibir linfoterapia?

Sí, en casos de fiebre, cáncer u otras enfermedades malignas como edema cardiaco, crisis asmática, tromboflebitis y reacciones alérgicas graves.