¿Por qué se practica la lobuloplastia?

La lobuloplastia es una sencilla cirugía para la reparación de los lóbulos de las orejas, cuya demanda ha aumentado mucho en los últimos años. Es una técnica que se practica frecuentemente, ya que es normal que los lóbulos se rompan, se rasguen o se descuelguen de su posición correcta. Esto ocurre por el paso del tiempo y por el uso de pendientes grandes o pesados, por accidentes, por la moda de las dilataciones, por piercings, etc.

Estas prácticas pueden llevar consigo deformaciones de esta zona de las orejas, y producir un agrandamiento excesivo del orificio o incluso la rasgadura definitiva del lóbulo, que ocurre, por ejemplo, con un tirón involuntario o porque el pendiente se engancha. Como resultado, nos encontramos con pacientes que han tenido que renunciar a llevar pendientes o que han visto cómo su lóbulo se iba deformando progresivamente, alargándose y perdiendo su forma normal.

¿Cómo es la intervención?

Para corregir este problema es necesaria una simple intervención de tipo ambulatorio. Esto quiere decir que no vas a tener que estar hospitalizado/a. Solo aplicamos anestesia local, y el proceso llevará unos 40 minutos. A los 15 días de la intervención el lóbulo estará listo para que pueda realizarse un nuevo orificio para el pendiente.

¿Cómo es el post-operatorio?

Puede que le recomienden no realizar esfuerzos físicos, como en cualquier intervención, pero en cualquier caso, puede llevar una vida perfectamente normal.

¿Qué puedo hacer para prevenir la deformación del lóbulo de la oreja?

Evitar algunas malas costumbres, como dormir con los pendientes puestos, llevar pendientes demasiado pesados o usarlos mientras se practican actividades deportivas. Esto, a la larga, afectará negativamente en esta zona de las orejas.

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